JUEVES 23 DE ABRIL, EVANGELIO DEL DÍA Y REFLEXIÓN «NO TEMÁIS, ALEGRAOS»
Lectura del santo Evangelio según San Mateo 28, 1-10
En la madrugada del sábado, al alborear el primer día de la
semana, fueron María la Magdalena y la otra María a ver el sepulcro.
Y de pronto tembló fuertemente la tierra,
pues un ángel del Señor, bajando del cielo y acercándose, corrió la
piedra y se sentó encima.
Su aspecto era de relámpago y su vestido blanco como la
nieve; los centinelas temblaron de miedo y quedaron como muertos.
El ángel habló a las mujeres: —Vosotras no temáis, ya
sé que buscáis a Jesús el crucificado.
No, está aquí: HA RESUCITADO, como había dicho.
Venid a ver el sitio donde yacía e id aprisa a decir a sus
discípulos:
«Ha resucitado de entre los muertos y va por delante de
vosotros a Galilea.
Allí lo veréis.» Mirad, os lo he anunciado.
Ellas se marcharon a toda prisa del sepulcro;
Impresionadas y llenas de alegría corrieron a anunciarlo a los
discípulos.
De pronto, Jesús les salió al encuentro y les dijo: —Alegraos.
Ellas se acercaron, se postraron ante él y le abrazaron
los pies.
Jesús les dijo: —No tengáis miedo: id a comunicar a mis
hermanos que vayan a Galilea; allí me verán.